Luego de acoger la solicitud de los fiscales Ignacio Rojas, Evelyn Peña y Alexis Casado, del Departamento Litigación Definitiva de la Fiscalía en Santo Domingo Este-Norte, un tribunal condenó a 20 años de prisión a hombre, encontrado culpable en la violación sexual de sus hijas de 9 y 16 años de edad, una de las cuales, se suicidó, en un suceso ocurrido en Santo Domingo Este.
El condenado es Franklin Santana, de 37 años de edad, domiciliado en la Avenida San Martin No. 239, Próximo a la Avenida Tiradentes, en el Ensanche La Fe, del Distrito Nacional.
Fue encontrado culpable en los ilícitos penales de violación sexual e incesto, en perjuicio de sus hijas de 9 y 16 años de edad, cuyos datos son reservados por asuntos de Ley.
La condena fue dictada por el Primer Tribunal Colegiado de la provincia Santo Domingo.
De acuerdo a la acusación, el 19 de diciembre del 2024, llegó a esta Unidad de Atención Integral a Víctimas de Violencia de Género, Intrafamiliar y Delitos Sexuales, ubicada en la calle Puerto Rico, del sector Alma Rosa Ira, la tía de las dos menores, en su representación.
La mujer indicó que recibió dos notas de voz de la madre de las menores, donde decía que la menor de 16 años de edad, había salido de la vivienda a las 4:00 de la tarde y que regresaba a las 8.00 pm del mismo día y hasta la fecha de la denuncia 19/12/2024, no había regresado a la vivienda.
La tía denunciante le expuso a la madre que fuera a poner la denuncia o salir a buscarla para dar con la menor de edad, y la madre le expresó que dicha menor de edad solía hacer esas actitudes.
Es así que la tía de inmediato comenzó a buscar en sus pertenencias donde encontró una mascota, donde la menor de 16 años relataba todas sus actividades que le ocurrían en su vida personal, pero lo que más llamo la atención fue que en la última página de esta mascota decía la siguiente frase: “Que su Papá quien debe cuidarla no la cuido”.
También relataba que en una ocasión la menor de 16 edad, encontró al ahora condenado, tocando las partes íntimas de su hermana la menor de nueve años edad, y por esto le reclamo diciendo porque le hacía esto si no le gustaba y el imputado respondió diciendo: “Como sabes que no le gusta”.
La menor de edad de 16 años, le dijo que él (el imputado) puede fijarse no le gustaba y que ella era muy pequeña, señalándole que a ella le gustaba cuando el imputado, se lo hacía, pero que a su hermana de 09 años no lo hiciera porque iba a denunciarlo, haciendo hincapié que su hermanita contaba con su ella todo el tiempo y no como en su caso, que nunca tuvo quien la defendiera.
En la mascota la menor dijo que su hermana de nueve años le comentó que su papá, el ahora condenado, acostumbraba a darle $5.00 y $10.00 pesos para que se dejara tocar en su cuerpo, inmediatamente la menor de 16 años, le dijo al imputado Franklin Santana, su padre, que si continuaba en esta práctica iba a denunciarlo.
En esas circunstancias, el ahora condenado le dijo que, si era una amenaza, por lo que la menor de 16 años contesto que no era una amenaza, pero que iba a denunciarlo, tomado a su hermana de nueve años y se la llevó al parque más cercano, donde comenzó a cuestionarla sobre las agresiones sexuales que habría sufrido a manos del padre, el ahora condenado, relatando la niña todo lo que este hacia desde la primera vez que fueron a la piscina.
De acuerdo al relato de la tía denunciante, la madre de las menores, presuntamente tenía conocimiento de lo que estaba ocurriendo, pero esta nunca fue a denunciarlo por el daño que estaba ocasionando a las menores de edad hasta su apresamiento.
En fecha 21 de diciembre del 2024, fueron apresados mediante la Orden Judicial de Arresto número 539-EMES-02569, tanto el ahora condenado, como la madre de las menores (ambos esposos).
Posteriormente, un juez de Jurisdicción de Atención Permanente del Distrito Judicial de Santo Domingo, le impuso a la pareja prisión preventiva como medida de coerción.
En el Informe Psicológico y Cámara Gessell realizado a la niña de nueve años, la menor narró de perfectamente las acciones y conductas propias que tenía el imputado, afirmando que fue agredida sexualmente desde los 8 años de edad y que, a su hermana de 16, también la agredía sexualmente.
En el juicio, realizado el 24 de noviembre del 2025, el tribunal compuesto por Elizabeth Esperanza Rodríguez Espinal (presidente), Flor E. Batista Polo y José Leonel Asencio Quezada, (miembros), encontró al imputado culpable de violar las disposiciones contenidas en los Artículos 331 y 332-1 del Código Penal Dominicano, que tipifican y sancionan la Violación Sexual e Incesto, y el Artículo 396 de la Ley 136-03, Código del Menor, en perjuicio de las menores de edad, el Estado Dominicano.
La madre de las menores, imputada de complicidad y violentar los Artículos 59 y 60 del Código Penal Dominicano, fue declarada la absolución, por insuficiencia de pruebas.
En proceso de la investigación, fue descubierto que la adolescente de 16 años se suicidó, lanzándose al mar Caribe, en las proximidades del municipio de Boca Chica.
Las fiscales Odalis Beltrán y María Sánchez, de la Unidad de Atención Integral a Víctimas de Violencia de Género, Intrafamiliar y Delitos Sexuales de la provincia Santo Domingo, estuvieron a su cargo la investigación y formulación de acusación al justiciable.
El fallo establece que el condenado cumpla la pena impuesta en el Centro de Corrección y Rehabilitación (CCR) Najayo-hombre, en la provincia San Cristóbal, y que sea comunicada la decisión al juez de Ejecución de la Pena, para su cumplimiento.
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