Le quedó mal el muñeco a la Policía Nacional con relación al asesinato de cinco hombres en una barbería del sector La Barranquita, provincia Santiago la tarde del pasado miércoles en lo que la institución denominó como un “intercambio de disparos”.
Mientras tanto, el Ministerio Público, muy locuaz en algunos casos, ha mantenido un silencio sepulcral a pesar de los reclamos de los familiares de por lo menos dos de los jóvenes acribillados a tiros.
Según testigos, el equipo de la Dirección Central de Investigaciones (Dicrim), no se limitó a ejecutar a los hombres, de quien aseguran estaban desarmados, sino que robaron todas las cámaras de seguridad de la barbería y el edificio.
Dicen que también se llevaron el dinero y otras pertenencias de la peluquería de Vladimir.
Los agentes se llevaron hasta el teléfono de una señora que pasaba por el lugar y decidió registrar el hecho.
Ellos querían borrar toda evidencia de sus acciones… y al parecer lo lograron, pero no podían matar a todos los testigos que vieron cómo ocurrieron los hechos.
Ha sido tanto el revuelo que el director de la Policía Nacional, Ramón Antonio Guzmán Peralta declaró la tarde de este jueves, en lo que parece un “media tour” por los medios de comunicación que investigarían el caso.
Durante el asalto a la barbería, el equipo de la Dicrim disparó sin discriminación y acribilló a tiros a Edward Bernardo Peña Rodríguez; Carlos Enrique Guzmán Navarro (El Charly o Charli Chasc); José Vladimir Valerio Estévez; Elvis Antonio Martínez Rodríguez; y Julio Alberto Gómez (La Tabla).“Todos resultaron heridos en el intercambio de disparos y fallecieron mientras recibían atenciones médicas en el Hospital Doctor Cabral y Báez, de Santiago”, dice el parte policial.
Es que la tarde del miércoles, los agentes de la Dicrim se tiraron tirando e hicieron un corte bajito en la barbería de José Vladimir Valerio Estévez, quien corrió por su vida y lo acribillaron en el callejón de la parte suroeste del edificio, donde además funcionan otros negocios, según testigos.
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Sin embargo, los paramédicos del Sistema de Emergencia 9-1-1 que llegaron al lugar no encontraron que hacer y llamaron al Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) para que recogiera los despojos humanos dejados por la Policía tendidos en el parqueo y callejón del edificio.
De acuerdo con la Policía Nacional, el jefe de la banda de presuntos delincuentes Ronny Abel Sánchez Morillo (Mudita), logró escapar a bordo de una jeepeta Mazda blanca sin placa y es buscado por sus agentes.
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La familia del barbero
A la escena del quíntuple crimen se presentaron tres de los familiares de las cinco víctimas. Todos negaron que fueran delincuentes, como asegura la Policía que al vapor le armó expedientes sin presentar datos probatorios.
Los familiares del barbero José Vladimir Valerio Estévez negaron que fuera un delincuente y que muriera en medio de una persecución, como dijo la Policía.
Su esposa, Mary Fabián declaró que Valerio Estévez se encontraba en la peluquería al momento de la balacera.
Allí también llegó su padre, quien se mostró sorprendido de que la Policía dijera que su hijo era un delincuente, ya que nunca enfrentó problemas con la justicia.
Igual indignación mostraron familiares de Julio Alberto Gómez (La Tabla), quienes aseguraron que visitaba todos los fines de semana la barbería a recortarse el pelo.
Pidió al vocero de la Policía, Diego Pesqueira que muestre las fichas que tenía, ya que nunca había tenido problemas con la Dicrim.
Aseguró que la Policía lo que hizo fue “una masacre a gente inocente que lo único malo que hicieron fue ir a recortarse a esa peluquería como estaban acostumbrado a hacerlo”.
Dijo que la Policía mata los muchachos y le ponen armas de fuego y dicen que son delincuentes.
“Yo quiero que me enseñen en qué hospital está el policía que dicen que está herido”, insistió Rodríguez.
En el último párrafo de la nota policial dando a conocer el caso, la institución dijo que el cabo Yohandy Encarnación, resultó herido y recibe atenciones médicas en un centro de salud de esta ciudad. Nadie lo ha visto.
No son delincuentes, lo único que hicieron fue ir a pelarse a esa peluquería
“El no tenía problemas con Dicrim. Búsquelo, y dígame a dónde tenía problemas con el Dicrim
Dijo que La Tabla llegó a su casa y tan pronto terminó de comer se fue a recortar a la barbería donde lo sorprendió la muerte a plomo.
Señaló que Gómez era mecánico en un taller en La Yaguita de esta ciudad.
Ella también exigía que busquen las cámaras.
Se llevaron las cámaras
El administrador del edificio dónde ocurrió la tragedia, Fermín Valerio, confirmó que la Policía se llevó todas las cámaras y los DVR.
Valoró como muy mala la acción policial y señaló “a Dios y eso se hace venir a matar uno que se estaba recortando ahí, y cuando ve el tiroteo sale corriendo y ahí lo matan”.
Dijo que el barbero y el que estaba recortando también fueron asesinados.
Genara Rodríguez, cuñada de El Charly dijo que este vivía en el barrio Libertad y solía recortarse en esa barbería.
La comunidad de Santiago se encuentra conmocionada tras la muerte Julio Alberto Gómez, un joven peluquero, que fue ultimado en medio de un operativo realizado por la Policía Nacional.
Los familiares expresaron su pesar ante las cámaras. “Nosotros lo que queremos es justicia, porque él era un joven trabajador, que no se metía con nadie”, declaró su tía Gabriela Espinal.
Mientras que el abogado Rafael Valerio primo del barbero Vladimir aseguró que todo el mundo sabe que él no era delincuente.
“Ya a él lo condenaron, lo mataron, lo remataron, matándole la moral y la de la familia”, señaló el profesional del derecho.
Reveló que Vladimir tomó un préstamo en una cooperativa para remozar su barbería, con la colaboración del gerente de esa institución.
****Artículo de Genris García / de Vigilanteinformativo.com
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